“A ARIAS ME LO IMAGINO SIENDO HINCHA DE RACING EL DÍA DE MAÑANA”

Marcelo Asteggiano, ex defensor de Racing en la década del ’80, habló mano a mano con La Número Uno, donde se refirió a su trabajo en Rafaela que derivó en jugadores para La Academia, el perjuicio de no tener a Arias y Mena en la semifinal ante Boca, su pasado en el club, las Copas Libertadores ’89, ’97 y mucho más.

Defensor central, llegó a probarse a Racing con apenas 14 años de edad proveniente de Rafaela, su ciudad natal. Subió a la Primera del club cuando éste estaba en la vieja Primera B, con la Academia en Primera División era uno de los reemplazos inmediatos de Gustavo Costas o Néstor Fabbri cuando alguno de ellos no pudiera estar. Muy identificado con Racing (se confiesa hincha), club el cual le dejó una honda marca en su vida, estuvo en el ascenso del ’85, en la Supercopa del ’88, jugó la Libertadores del ’89. Trabajó en la dirección técnica durante mucho tiempo junto al Chemo Del Solar(aquel volante peruano que brilló en Perú y Europa), dirigiendo a Sporting Cristal, Universitario o la propia Selección de Perú entre otros. Hasta hace muy poco trabajó coordinando las Divisiones Juveniles de Atlético Rafaela. “Terminé el contrato el 31 de diciembre, estuve tres años trabajando en Atlético Rafaela, donde tuvimos la posibilidad de mandar algunos chicos a Racing, un chico categoría 2005 (Almaraz, centrodelantero), y un enganche categoría 2006 (Pérez). Teníamos muy buena relación con Racing, y lo bueno es que se pudo hacer negocios, incluso con Copetti, que fue una buena adquisición”, comentó Marcelo para luego agregar: “La última etapa del campeonato de ascenso,Copetti hizo muy buenos partidos, hacía muy buena dupla con Bieler. Atlético llegó hasta las últimas instancias, ellos mantuvieron un nivel muy importante en cuanto a goles, una eficacia tremenda. La verdad que Copetti tiene una fortaleza física admirable, desde lo físico parece un jugador europeo, y Bieler con toda la experiencia de su carrera para armar una dupla en la cual se entendieron muy bien y le dieron muy buenos resultados a Atlético Rafaela”.

Mañana lunes Racing enfrentará en San Juan a Boca Juniors por un lugar en la final de la Copa de la Liga, y sabido es que la Academia no podrá contar con Gabriel Arias y Eugenio Mena, afectados a la convocatoria de la Selección de Chile. “Me da una pena bárbara porque son dos jugadores muy importantes. El hecho que no hayan llegado a un acuerdo, no sé de cual manera se maneja eso, uno se pone en el lugar del jugador, más allá que uno ama a su Selección, yo he vestido la camiseta de la Selección Sub 20 y Sub 23 cuando era futbolista, pero también uno tiene un cariño muy especial por el club, y creo que Arias y Mena están muy identificados con Racing. Yo me imagino a Arias el día de mañana siendo hincha de Racing, porque la verdad que el jugador que pasa por Racing le queda un sentimiento tremendo por el club. En este caso, yo no sé si hubiese tomado la decisión de hablar con el técnico de la Selección (de Chile) y explicarle. En el caso que sea titular es lógico que voy a estar a las órdenes como voy a estar siendo suplente, pero creo que teniendo un buen diálogo con el técnico, él tendría que entender que es solamente unos días para después llegar y sumarme, pero le manifestaría que quiero jugar en Racing, yo hubiese charlado con el técnico personalmente para hacerle entender que quería jugar este partido contra Boca y después ponerme a disposición de la Selección. Yo no sé si el reglamento lo protege como futbolista, yo he trabajado en la Selección de Perú con el Chemo Del Solar en las Eliminatorias para el Mundial de 2010, y creo que hay cosas que se consensuan con el técnico y luego con la Federación, para tranquilamente llegar a un acuerdo”, lamentó el ex zaguero y añadió: “Racing es el gran perjudicado sobre todo con dos jugadores tan importantes, y sobre todo con el arquero, que hoy en día es el mejor del fútbol argentino. Está pasando por un momento brillante, y viene hace un tiempo considerable siendo figura, es un pilar muy importante para Racing, y no tenerlo el próximo partido sin dudas que es una pena”.

En la actual Copa Libertadores, compartieron el Grupo E tanto Racing como SportingCrsital, dos clubes por los cuales pasó Asteggiano. “Creo que Racing ha ido creciendo de menor a mayor desde la llegada de Pizzi, tuve la posibilidad de trabajar con el preparador físico de Racing, Alejandro Richino, trabajé ocho años con él, en Cristal, en la U (Unversitario), en la Selección (Perú), es un excelente profesional y Juan (Pizzi) lo mismo. Yo tenía mucha confianza en que pudieran revertir ese momento en el que eran cuestionados, después el equipo ha ido encontrando lo que pretende el técnico y hoy el presente es bueno. Creo que en la Copa también ha ido de menos a más, le tocó una zona en la cual me parece que era accesible a la clasificación para un grande como Racing, pero todos teníamos esa duda porque cuando se inició la Copa no era su mejor momento, entonces un poquito de dudas te generaba. Pero bueno, ha ido creciendo hasta tener un rendimiento óptimo hasta el último partido. A veces uno se entusiasma, sobre todo con la Libertadores que es algo que todos quisiéramos que Racing llegue a una instancia final. Más allá que uno ha sido futbolista, es hincha y uno sueña con verlo en alguna final de Libertadores”.

En cuanto a como llegó a probarse a Racing recordó: “Yo llegué a Racing desde Rafaela a los 14 años, me llevó una persona que era de Rafaela, el cual tenía un nexo con la gente de Racing, después la tuvo con la gente de Lanús más adelante. Hice una prueba, quedé, en ese momento jugaba en la Octava División, fui con muchas ganas e ilusión, uno deja muchísimas cosas, yo soy de una familia de clase media trabajadora, pero más allá de eso deja muchas cosas, el colegio, afectos, familia, deja todo para ir detrás de un sueño que es intentar llegar a ser futbolista profesional y jugar en la Primera de Racing que fue donde fui yo. Me desarrollé en las Divisiones Inferiores, en un momento estuve en la Selección Sub 20, estuve en Reserva, es todo muy rápido, en Cuarta no jugué, di el salto de Quinta a Reserva y estaba en la Selección Argentina así que ya empecé a estar en el banco de suplentes, a alternar. Racing en Primera tenía un plantel muy competitivo, con jugadores muy buenos en todas sus líneas. Había tres o cuatro jugadores por posición, me animo a decir de los mejores jugadores, por ejemplo teníamos cuatro númerosdiez o enganche, teníamos a Rubén Paz, Colombatti, Ortega Sánchez, el Panza Videla. En mi puesto estaba Gustavo Costas, que era el símbolo y el ídolo del club, Néstor Fabbri, que la verdad era un jugador tremendo. Costas era un jugador muy técnico de una gran calidad, y Fabbri tenía todo, era un jugador de Selección Argentina, un jugador que llegó a Racing muy jovencito con 17 o 18 años, que se puso la camiseta y parecía que hacía diez años que jugaba en el club. Son chicos que no les pesaba, que juegan en un club como Racing, o se ponen la camiseta de la Selección Argentina, juegan con 50 o 100 mil personas y tienen una personalidad que es increíble, les da lo mismo jugar en un estadio lleno con 17 o 18 años, eso es admirable. Después tuve un par de compañeros que me pasó esto, que viví esto, Fabbri fue uno, después tuve un compañero como Miguel Rebosio que jugó en el Zaragoza de España, después Zambrano que ahora juega en Boca, lo tuve en la Selección de Perú, que a los 18 años lo citamos, se puso la camiseta, jugó contra Argentina con mucha madurez. Néstor (Fabbri) hablaba en el vestuario como si fuese un jugador de 35 años, pero eran dos muy buenos centrales”.

Como se dijo líneas arriba, conformó el plantel que logró el ascenso en 1985. “A mí me tocó vivir en Divisiones Inferiores todo el proceso en el cual el club tenía la cancha clausurada, el estadio estaba abandonado, fue un momento muy difícil, me tocó vivirlo en las inferiores. Después cuando debuté en la Primera División, lo hice el segundo año de Racing en el ascenso, creo que jugué diez o doce partidos nada más, y después Coco Basile habló con los jugadores más jóvenes (yo era uno), Zubczuk, el Flaco Lamadrid. Nos llamó al vestuario de él, fuimos los tres, y nos dijo que en el Octogonal final no nos iba a tener en cuenta, no por el rendimiento que habíamos tenido sino para protegernos, que esa instancia la iba a jugar con los jugadores grandes, y nos explicó que si nos ponía a nosotros corríamos el riesgo de lo que ya había pasado en Racing, cuando camadas de jugadores habían sido desechadas o quemadas por no lograr el objetivo. Prefirió jugar con esos jugadores grandes, en mi caso estaban Costas y el Negro Longo, que era un jugador mayor. En ese momento uno es joven y te cuesta entender, pero con el tiempo te das cuenta y le das la razón al Coco, que la verdad que para nosotros fue como un padre, yo lo tuve tres años y medio en Primera División y nos marcó a fuego a muchos. Tengo los mejores recuerdos de ese plantel, muy profesional, con muy buenos jugadores, con la ilusión de querer ascender, y gracias a Dios se dio. Se trabajó mucho, en esa época se trabajaba en condiciones que no son las actuales, pero con un plantel muy humilde, muy luchador, con buenos jugadores, pero sobre todo humilde, con un objetivo muy claro, inclusive del comando técnico también”.

En 1989, Racing logró volver a jugar una Copa Libertadores después de 21 años, torneo en el que Marcelo Asteggiano tuvo más participación (hasta convirtió un gol). “Nos eliminó quien después fue campeón, Nacional de Medellín. Siempre me quedó ese sabor… Porque cuando ellos nos hacen el 2-1, teníamos que hacer un gol más para ir a penales, tuvimos cinco o seis situaciones de gol, pegaba en el palo, la sacaba Higuita, era increíble, son esas cosas del fútbol que no se dan, y terminamos quedando afuera en octavos, y la verdad que si pasábamos esa llave, yo no sé quehubiese pasado después. Yo jugué ocho copas Libertadores con otros clubes, y a veces en octavos cuando uno pasa, hay como un punto de quiebre más allá que Racing es un club grande, poderoso, pero yo creo que a veces en octavos dejar afuera, por ejemplo cuando jugás en otro tipo de clubes que dejás afuera a un equipo grande, a un Flamengo, a un River, Boca, Racing, te fortalece desde lo anímico y decís si eliminamos a este equipo, estamos para cualquier cosa. A nosotros nos pasó con ese equipo, Nacional era la Selección de Colombia, Higuita, Perea, Leonel Álvarez, Usuriaga, un gran equipo. Además el gol que nos hacen, un tiro de punta y la clavó en el ángulo, nos quedó un sabor amargo, uno era joven en ese momento y como que no tomaba real dimensión, después con el tiempo lo pensás y lo analizás de otra manera”.

Asimismo, en 1997 Asteggiano formó parte de aquel SportingCrstal que llegó a la final de esa Copa Libertadores, que quedó en manos de Cruzeiro, pero en las semifinales, tuvo que enfrentar a Racing.“Fue difícil, me encontré con mucha gente conocida, que a mí me marcaron en mi carrera y me cuidaron como si fuera un hijo. En el ’97 cuando llegué, fuimos a entrenar a la cancha de Racing y fue la última vez que vi a Tita (Mattiussi), que para mí fue mi segunda mamá, la vi ahí, terminé de entrenar y me quedé charlando con ella, después no la vi más, tener en el banco al profe Valenzuela que había sido mi profe en las inferiores casi toda mi carrera, al Coco Basile, al Panadero Díaz, gente que a uno lo marcó, son esos técnicos que no solamente te forman como jugador de fútbol sino también como persona, tienen códigos, son de los antiguos técnicos, pero más allá de ser técnicos son personas fantásticas. La gente de Divisiones Inferiores me dio una plaqueta, vi mucha gente conocida en ese momento previo al partido, me tocó mucho….Pero bueno, uno estaba representando a otro club, también teníamos la ilusión de jugar una final de Copa Libertadores sabiendo que era muy difícil ante un rival como Racing, sobre todo en condición de local, donde Racing era muy fuerte, yo no me olvido nunca como estaba ese estadio, era tremendo, yo nunca viví una cosa igual. Sacamos un buen resultado, tuvimos un poco de suerte, porque estábamos más para que Racing haga el cuarto gol (ganaba Racing 3-1), y terminamos perdiendo 3-2, con un gol de Bonnet. Después nosotros sabíamos que en Lima nos hacíamos muy fuertes, nosotros en Lima veníamos de años ya, tres o cuatro ganándole a los rivales que enfrentábamos, le habíamos ganado al Cruzeiro, Gremio, River, Racing, en Lima sabíamos que éramos muy fuertes, y tratábamos de en lo posible hacer un buen partido en condición de visitante, o hasta perder por un gol, porque sabíamos que en Lima lo podíamos dar vuelta”.

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