"LA GESTIÓN DE BLANCO ES BUENA, PERO NO ES EL MEJOR PRESIDENTE DE LA HISTORIA"

Juan De Stéfano, ex presidente de Racing, habló en exclusiva con La Número Uno, y además de recordar muchos sucesos durante su gestión, disparó contra la actual dirigencia.

Fue dirigente metalúrgico, pero en la política llegó a ser Secretario General de la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires durante el mandato de Victorio Calabró, quien ejerció el poder como gobernador desde enero de 1974 hasta el golpe de Estado en marzo de 1976.

Su participación fuerte en el mundo Racing empezó luego del descenso de 1983, al año siguiente para ser más preciso. “Yo colaboré con Capozzolo y Taddeo, después me abrí, Racing se fue a la B con Taddeo y Vinagre. Taddeo era un tipo extremadamente honesto, pero cabeza dura también, y lo mandaron a la B algunos presidentes más pillos que se pusieron de acuerdo. Taddeo no escuchó, era muy caprichoso, muchos jugadores de esa época no estuvieron a la altura y se fueron a la B. Cuando se fueron a la B nació la Comisión de Apoyo para ascender. La Comisión estaba integrada por racinguistas importantes, como el señor Teitelman, hijo de un ex presidente de Racing entre ellos. Taddeo y Vinagre se quedaron, y nosotros formamos la Comisión de Apoyo. El primer año no pudimos ascender porque teníamos en contra a Grondona y a Deluca, nos ganó Gimnasia los dos partidos, y después me jugué la vida (el único político era yo de ese grupo), el resto eran empresarios acomodados, muy buena gente, y les dije que había que formar el seleccionado de la B, Deluca quería que estemos diez años en la B porque Racing, como San Lorenzo antes, vestía a la B, le daba jerarquía. Deluca era un dirigente bastante perverso, presidente de Defensores de Belgrano, jugaba mucho con los réferis. Después traje a Walter Fernández, de Defensores, a Miguel Colombatti de Morón, fui un día entero a Lanús y traje a Horacio Attadía y Néstor Sicher, el resto de los dirigentes trajeron otros jugadores y formamos un buen equipo”.

También contó como fue la elección del entrenador. “Nos reunimos con la Comisión, y yo les dije que había que traer de entrenador a alguien que calme las fieras, y fui a buscar a Agustín Cejas. Anduvo más o menos bien, tengo un profundo recuerdo de él, pero no alcanzó. Esto que voy a contar es inédito, habíamos perdido en Santa Fe, y yo me tomé un café con Víctor Hugo Morales, y me dijo que así no salíamos, que teníamos que traer a alguien de envergadura, y me dijo: “Sabés quien es el técnico?, Basile”, y me dijo que se había ido de Vélez. Lo llamé, él estaba en Mar del Plata, vino, nos reunimos en La Raya, y Coco hizo gala de su racinguismo, me dijo que sí, le pregunté si teníamos que hablar de plata y me dijo que ni en pedo. Primero saquemos a Racing de la B y después hablamos, a mí no me interesa la plata, le debo todo a Racing me dijo. En la primera final le ganamos a Atlanta 4-0 y Deluca me hizo trampa, porque yo pisaba poco la AFA y el resto de la Comisión también, por diferencia de goles ya estábamos en Primera, pero Deluca lo cambió y dijo que la diferencia de gol no contaba, y si perdíamos la revancha por cualquier resultado, había que ir a un desempate, pero empatamos 1-1 y ascendimos”.

El mismo fin de semana del ascenso de Racing, hubo elecciones en el club que dieron como resultado a Héctor Rinaldi como presidente de la institución, pero su mandato no fue completo en tiempo. “Un día me llamó Héctor Rinaldi y me dijo que agarre el club, que él no podía más. Rinaldi es un buen tipo, pero no la gente que lo rodeaba. La Comisión lo quería expulsar a Héctor, yo le busqué la vuelta para que solamente lo suspendan. Después agarré yo el club, a la base de la B la reforcé, conjuntamente con la Comisión, y salimos campeones de la Supercopa y de la Interamericana. Teníamos un equipazo”, contó Juan.

“En esa época yo vivía mangando, un hincha de Boca (Legnani) me prestó un millón de dólares, que se la devolví con la venta del Beto Carranza. Matiauda y Teitelman también pusieron plata, Vinagre, Yabrán (él la regaló al final), poníamos porque no había una moneda. Una noche Héctor Magnetto nos dio dos millones de dólares a los dirigentes para la televisación, con esa plata por ejemplo Alegre pagaba deudas en Boca, y yo me fui por la avenida Calchaquí para pagar siete pedidos de quiebra de jugadores que se habían ido a la B. Además hubo otros empresarios que ponían plata que ahora no recuerdo los nombres, pero fueron varios, y les pido perdón por no acordarme”, y añadió: “La Sede de Racing estaba muy mal, el que la había construido en su momento era el primer cirujano plástico de América, Malbec. Eso llegó a un estado de abandono total, y vino un amigo, Carlitos Iglesias, y me dijo que había una gente que la quería hacer toda nueva. Los busqué en Almagro, y me dijeron que me hacían la sede nueva a cambio de un contrato de diez años para explotar ellos la sede, creo que arreglamos el 70% para Racing y el 30% para ellos. El contrato lo hicieron el Doctor Ameal que es juez de la Nación, y un escribano que no recuerdo su nombre, que me perdone (creo que Spotorno), que siempre me invita a comer al Jockey Club y yo por mi condición de peronista no voy. A la inauguración vinieron Mirta Legrand y Diego Maradona”, recordó De Stéfano.

Siempre fue un misterio saber con certeza de que cuadro era Juan Domingo Perón, y De Stéfano, lo conoció de manera personal cuando éste se encontraba en España. “Todas las veces que estuve con Perón, tuve vergüenza de preguntarle de que cuadro era, no sé si era de Racing o de Boca. Él era un sabio, un gigante, está entre los tres mejores presidentes de la historia argentina. Era extremadamente decente y misericordioso. Yo sé como vivía él en España. En la foto que se ve publicada en varios lados en la que estoy con él, fue un día que estuvimos en España juntos Perón, Leonardo Favio y yo. Además estaba Sívori que había ido con la Selección Nacional, pero Lanusse no permitió que los jugadores vayan a verlo a Perón”, confesó.

Hace aproximadamente un mes, este medio habló con Miguel Ángel Ludueña, ex volante de Racing quien integró el plantel campeón de la Supercopa, y explicó que su paso a Independiente se debió a un tema exclusivamente económico, dado que para él era un trabajo. “Ludueña se fue a Independiente porque yo no estaba acá en ese momento, estaba en Italia porque jugamos contra el Nápoli de Maradona. Lo transfirió un dirigente del club que se llamaba Crespo, lo dejó ir a Ludueña y trajo al Panza Videla. Ludueña se fue porque es un traidor, siempre lo tuve en Racing al día. Esas cosas son traiciones, para traerlo al club, cinco dirigentes de Racing viajaron a Córdoba como diez veces, estaba en un conflicto terrible. Matiauda fue quien lo había descubierto cuando enfrentaba a Racing. Costó mucho trabajo destrabar su situación, y nos pagó con eso, si yo estaba no pasaba eso”, afirmó el ex presidente del club.

Hacia fines de 1988, Racing marchaba primero en el torneo (temporada anual, finalizó en 1989). En la última fecha de la primera rueda, la Academia recibió a Boca, y una agresión a Navarro Montoya (arquero de Boca) dejó como resultado el partido perdido para Racing, y dos puntos de descuento. “Una persona vino al hotel para ver al Coco (Basile) y arreglar el empate, y Coco lo sacó a trompadas. Esa persona mandó a uno o dos hinchas de Boca atrás del arco, tiraron una piedra arreglados con Navarro Montoya que se tiró, y Grondona aprovechó y nos sacó cinco puntos, esa es la única verdad. Ese equipo era campeón caminando sino, era un equipazo”, aseguró De Stéfano, quien recordó otros dos casos durante su gestión. “Perico Pérez se fue de Racing con el pase en blanco porque no quiso firmar su contrato. Con Lamadrid ahora nos saludamos, él trabaja en la Municipalidad, no le guardo ningún rencor, vino a la platea de Racing a saludarme con los hijos vestidos de Racing, con eso me alcanza y me sobra, con Perico Pérez no nos hablamos todavía. Perico Pérez debutó en Mar del Plata y el primer reportaje se lo pedí yo a García Blanco, le dije que por favor le haga un reportaje a este pibe que iba a ser el cinco de la Selección Argentina, que era un fenómeno y que le pegaba muy bien a la pelota. Me porté de maravillas con él, pero él con Racing se portó pésimamente mal”.

Asimismo, contó de que manera se concretó la llegada de Roberto Perfumo a la dirección técnica de Racing. “Estábamos en un restaurante de Avellaneda, Coco Basile, el Panadero Díaz, Roberto Perfumo y yo. Esa noche el Panadero me dijo que esperaba para poner a Perfumo de técnico, y así nació Roberto como DT de Racing. Fue lo más lúcido que ví como entrenador, solamente lo puede superar Coco Basile que ganó 15 títulos. Roberto cometió un gravísimo error, se peleó con el ídolo, con Rubén Paz. Le dije que no se podía, que él (Perfumo) fue un ídolo maravilloso en la historia de Racing y no podía cometer ese error, que la gente no lo iba a tolerar. No lo entendió y lo tuve que echar, la gente eligió a Rubén Paz, y yo también, porque se incendiaba la cancha, fue un pecado, porque Roberto era un fenómeno”.

Por otra parte, recordó el Apertura ’93 que se escapó por poco, y reveló el motivo de la no renovación del contrato de una pieza muy importante para jugar las cuatro fechas decisivas del certamen como lo era Adrián De Vicente. “Ese equipo andaba muy bien, Passarella me decía que íbamos a salir campeones nosotros. Babington había sido ayudante de Basile en el ascenso. No se pudo arreglar con De Vicente porque pedía mucha plata, no se pudo pagar, pero no porque no lo valiera, era el club el que no podía pagarle eso. Yo también me habré equivocado en no haberlo hecho por más tiempo al contrato, son errores, lamentablemente no se pudo hacer”, y agregó: “Los empresarios no pueden manejar un club, a mí me duran un minuto si quieren hacer eso, los saco a patadas. Ahora los empresarios manejan algunos clubes”.

Luego llegó el momento en el que explicó la llegada de otro emblema durante su gestión, como lo fue el Turco García. “Vino Recasens y me dijo que tenía el jugador ideal para Racing, la va a romper. Quién es le pregunté, Claudio García me dijo.¿ Es el de Vélez? le pregunté, es Claudio el de Vélez me contestó. Me llamó Menem porque lo quería para River, y Heller que lo quería para Boca cuando ya estaba en Racing. Si yo vendía al Turco, todo el piberío de Racing se iba a poner a llorar. Yo con un millón de dólares hubiera hecho maravillas en el club, pero no lo vendí. Para mí, es más ídolo el Turco que Rubén Paz en Racing, es un emblema del club”.

En cuanto a por qué piensa que perdió las elecciones en 1995 frente a Osvaldo Otero, confesó: “El uso del poder desgasta, yo me había cansado además. Yo no me iba a presentar, pero unos amigos me volvieron loco, había hecho la Sede nueva, habíamos sacado a Racing de la B, habíamos habilitado la cancha, habíamos ganado la Supercopa, habíamos construido un gimnasio en la cancha que estaba abandonado, habían venido Maradona y Mirta Legrand a inaugurar la sede maravillosa que tenemos, habíamos hecho todo lo que teníamos que hacer con mis amigos Matiauda, Teitelman, Ameal, y otros amigos que pido perdón por no acordarme ahora. Racing me dio mucho a mí, no me hizo famoso porque yo había sido Secretario General de la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires y Secretario metalúrgico. Un día un dirigente de Racing en una Asamblea le dijo a Saccol que no se haga el vivo, porque usted cuando vino a Racing era una heladera, y ahora es el señor Saccol, los clubes te dan un vuelo que no te los da nadie, Macri fue lamentablemente Presidente de la República porque fue presidente de Boca campeón. Como errores tengo no haberme ido antes, ese es el mayor. Después la gente me critica el autoritarismo, y mi falta de sentido democrático de las cosas”.

También se hizo un lugar para opinar de la actual dirigencia.“La gestión de Víctor Blanco es buena, pero es una falta de respeto decir que es el mejor presidente de la historia. A los fundadores del club, al presidente campeón del mundo, Pico, Saccol, Cúneo y compañía. Es una falta de respeto a grandes presidentes que tuvo Racing, Blanco no es el mejor presidente de la historia ni mucho menos. Blanco no deja en el club más que dos campeonatos, habiendo vendido jugadores por 150 millones de dólares. Aprovecho además para decirle a Blanco que Racing no es una monarquía, que no le falte el respeto a los hinchas de Racing diciendo que su hija puede ser presidenta. Ha modificado el estatuto es verdad, lo hizo de manera democrática, pero todos sabemos como se manejó la Asamblea. Que no se quiera perpetuar en el club, y que no quiera hacer de Racing una monarquía. Racing tiene dirigentes muy importantes en la platea, yo cuando voy a la platea y miro, me canso de ver grandes potenciales dirigentes para Racing”.

Para finalizar, dejó un mensaje a la gente de Racing. “Los quiero entrañablemente, porque Racing es su gente y su historia, maravillosa, pasando por Gardel y por tantas otras figuras del arte y la música. Racing es un pedazo de la historia del fútbol mundial. Quería nombrar a un hincha de Racing maravilloso que es mi nieto Agustín, que va a la cancha vestido de Racing y nos abrazamos, y que nunca se va a olvidar el abrazo en el gol del Chileno Díaz cuando le hizo el gol a Independiente con nueve jugadores, esas cosas son para los tiempos. Le agradezco infinitamente a la gente de Racing, que me permita ir a la cancha, y disfrutar a este Racing. Soy de los pocos presidentes que van a la cancha, y soy bien recibido, así que de la mano con mi nieto Agustín, voy a seguir yendo a la cancha por muchos años, porque cuando yo no esté, va a seguir yendo mi nieto que es lo mismo”.

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